En Ortodoncia invisible se emplean unos alineadores prácticamente transparentes y extraíbles fabricados a medida, que garantizan un gran confort y estética durante el tratamiento.

La planificación del tratamiento comienza con un estudio minucioso de las fotografías, las radiografías y los modelos del paciente. Con toda esta información se elabora un plan de tratamiento completo, desde la posición inicial de los dientes hasta la posición final deseada.

Según ese plan de tratamiento, se confeccionan los alineadores transparentes, cuyo número será el necesario para la resolución completa del caso. Estos alineadores se deberán llevar siempre de día y de noche y se irán sustituyendo cada cierto tiempo por unos nuevos hasta la finalización del tratamiento.